Xiaomi 165W Power Bank 10000 (Integrated cable) es una excelente pieza de hardware, pero no es para todos. ¿Quién debería comprarla?

A mediados de marzo llegó al mercado checo la ya anunciada power bank Xiaomi 165W Power Bank 10000 (Integrated cable), que recibimos para probar. Después de aproximadamente dos semanas de pruebas, puedo decir que es exactamente esa pieza de accesorio que no sabías que necesitabas. Aunque cuesta un poco más que las soluciones comunes, ofrece una velocidad de carga fabulosa y un cable integrado que es más práctico de lo que parece a primera vista.

Cable integrado: ¿por qué sí y por qué no?

Uno de los principales atractivos de la nueva power bank es el cable integrado con salida USB-C, a través del cual se puede cargar el dispositivo conectado con hasta 120W de potencia. Esto es más que suficiente para cargar smartphones, incluidos los de fabricantes chinos, cuya potencia de carga soportada a menudo supera los 100 W, y también, por ejemplo, un portátil. 

El cable tiene una longitud de casi 20 cm, por lo que no estorba innecesariamente al trabajar con el teléfono conectado. Además, por supuesto, es una ventaja el hecho de que, en lugar de dos objetos –la power bank y el cable de carga–, solo necesitas llevar uno. En lugar de pensar qué cable llevar (algunos pueden no soportar una potencia tan alta como el integrado) y dónde encontrarlo (lo cual es un problema frecuente para mí), simplemente coges la power bank.

Utilicé la power bank con mayor frecuencia cuando fui líder en un campamento de verano a principios de julio. Dejar mi teléfono cargando tranquilamente era prácticamente imposible para mí, ya que tenía que usarlo para fotografiar o para preparar las actividades del campamento (lo que incluía comunicarme con otros líderes, organizar materiales, etc.). En ese momento, uno realmente aprecia poder llevar consigo una power bank con un cable integrado de longitud óptima y no tener que preocuparse por nada más.

Sin embargo, también veo ciertos aspectos negativos en el cable integrado. La power bank es un poco más difícil de empacar en el equipaje (por ejemplo, en una mochila completamente llena), ya que cuando el extremo se sujeta en un compartimento especial, la parte central sobresale considerablemente. 

A largo plazo, tendría una ligera preocupación sobre si el cable se dañará debido a la manipulación normal, así como al contacto con otros objetos en el equipaje. Después de unas pocas semanas de pruebas, por supuesto, no puedo decir si este miedo mío está justificado o no –y en el mejor de los casos, no debería poder confirmarlo ni siquiera después de un año–, pero el cable integrado parece exactamente el tipo de cosa que debería manejarse con el mayor cuidado posible.

Alta potencia a expensas de la capacidad

La Xiaomi 165W Power Bank 10000 (integrated cable), con unas dimensiones de 143 × 48 × 36 mm, todavía puede considerarse una power bank adecuada para viajar. Sin embargo, no es tan grande debido a su alta capacidad –que, por el contrario, se mantiene en los básicos 10 000 mAh–, sino debido a su potencia de salida de 165W (120W con el cable integrado, 45W con el puerto USB-C). 

Por lo tanto, esta power bank debería ser considerada principalmente por usuarios que realmente vayan a utilizar esta potencia superior a la estándar. Si tu teléfono o tablet no soporta carga rápida de al menos más de 80 W, o si no tienes un portátil, probablemente no necesitarás una power bank tan potente y te bastará con una solución más económica (o incluso una de precio similar, pero con una capacidad significativamente mayor).

La capacidad de 10 000 mAh en la práctica significa que no podrás cargar tu teléfono ni siquiera dos veces con la power bank (típicamente solo una vez al 100% y una segunda vez dependiendo de la capacidad específica de la batería de tu móvil), por lo que es necesario tener esto en cuenta. Para viajes donde exista el riesgo de estar varios días sin acceso a una toma de corriente, preferiría una power bank de al menos 20 000 mAh (si no quieres ahorrar batería de forma estricta).

Lo que es más agradable, sin embargo, es el soporte para la carga de 90W de la propia power bank. En solo 15 minutos, con el adaptador adecuado, podrás cargarla al 75%, lo que te dará suficiente energía para una carga completa del teléfono durante una pausa para el café.

Pantalla a color, un agradable extra

Un agradable extra en la power bank es la pantalla a color, a través de la cual se puede monitorear el proceso de carga del dispositivo y de la propia power bank, o la capacidad restante en porcentaje. En circunstancias normales, permanece apagada; puedes encenderla con el botón situado justo debajo. Quizás el único inconveniente de la pantalla es su menor brillo, lo que dificulta su lectura en exteriores.

Veredicto

En resumen, la Xiaomi 165W Power Bank 10000 (integrated cable) es una pieza de accesorio muy exitosa, pero no es para todos. El cable integrado es una ventaja en mi opinión, aunque a largo plazo me preocuparía un posible daño. Además, la pantalla a color integrada con una interfaz bien diseñada es una clara ventaja, y su mayor baza es, por supuesto, la potencia de 165W, con la que puedes cargar fácilmente tu móvil, tablet y portátil. Por un precio de 1 449 Kč, es en general un excelente producto que originalmente no pensé que me sería tan útil. Sin embargo, para viajes más largos, definitivamente llevaría un modelo con mayor capacidad.

¿Qué experiencia tienes con las power banks?